sábado, 20 de diciembre de 2008

Mientras escucho a la familia Gonzales Huamán discutir sus Planes de Negocio

La música de fondo son las voces de la familia Gonzales debatiendo ya no la viabilidad de sus negocios sino los números implicados en cada negocio que han decidido analizar. Son dos: Ganedería de Engorde (comprar toros para engondar) y una Pollería. Se han dividido en dos grupos. Suma, resta, multiplicación y división. Cuando llegaron el jueves estaban alejados de las matemáticas, como casi todos los que pasan por mi casa para llevar el taller. Al final del jueves les pedí que al día siguiente vengan con calculadora, compraron dos. Hoy, todo lo que suena son números. Me encanta. Cuando las matemáticas cobran sentido económico la gente comienza a usarlas de manera natural. El jueves se confundían con los números, hoy no. Lo mismo me pasó en Huáraz. Los dirigentes campesinos, aún con calculadora, no la achuntaban. Ceros de más o ceros de menos, pero sus operaciones matemáticas no daban con los resultados.
Jajaja, los que han optado por los pollos, gritan a la madre María que está en el otro salón consultándole sobre los ingredientes de una ensalada y los precios de los mismos. Qué bacán. La madre y la cuñada se han convertido en personajes clave, pensar que casi no vienen.
El chico que el primer día parecía como el más perdido hoy por hoy es el más activo. Ya ayer cuadraba a sus hermanas por no tener los pies en la tierra. "No entiendes, primero los números - decía". Ayer les pregunté sobre quién creían que iba ser de los diez participantes, la persona que más cambie de comportamiento. Él dijo YO. Sergio, se llama, es chófer de combi, gana 20 soles diarios. Dice que no es constante en la chamba, que apenas sus amigos lo llaman a jugar fútbol, el abandona el carro. Tiene 22 años. No ahorra, gasta en cosas que cree no debe gastar. Ropa, diversión con sus amigos.
Veo a la familia Gonzales hoy sábado y pienso lo que pasaría si las familias del Perú pudiesen pensar su economía como ellos la están pensando hoy. Cuánto mejor andaríamos. Y no debe ser tan difícil.
Estoy contento que estén acá.

1 comentario:

K. dijo...

Que estén allí es genial.
Superbendiciones a tu proyecto.