Este es un tema que he planteado al Directorio desde hace unas semanas: Ok., ¿cómo vamos? Quedan apenas pocos meses para que concluya el año. ¿Estamos cumpliendo nuestras metas?
El DirectorioMe reuno con un grupo de empresarios todos los miércoles. A la dinámica la llamo Directorio Ejecutivo, ya que es una mezcla de Directorio con Comité Ejecutivo semanal.
Tocamos tanto temas de largo plazo y decisiones estratégicas como del día a día.
Los empresarios provienen de diversos rubros, comparten en común que han llevado mi Taller.
La figura del Directorio es que todos somos miembros de una misma empresa con diversas unidades de negocio y que nuestro compromiso con el grupo es mejorar nuestra calidad de gestión. He creado esta fórmula de asesorar empresas pues tiene varias ventajas:
- Permite acabar con la soledad del pequeño empresario. El grupo le sirve de soporte para evaluar decisiones, para desahogarse, compartir angustias gerenciales y personales.
- Se crea un sentido de autoridad superior, un jefe al cuál rendirle cuentas, lo que permite un seguimiento de las decisiones tomadas por los empresarios participantes.
- Es barato pues la inversión en una asesoría individual se reparte entre varios participantes.
- Hay una permanencia en el tiempo lo que permite que el grupo y el individuo vaya madurando con el paso de los meses y años.
En fin, eso es el Directorio. Un grupo que te permite crecer, te da apoyo, te educa y te exige profesionalismo y seriedad. El asunto es que, como comencé diciendo, faltan menos de 120 días para que concluya este 2008. Y, sentí, siento; que es momento de preguntarle al grupo acerca de sus metas empresariales y personales.
¿Por qué? Porque a inicios de setiembre es momento de apretar el paso y fijar nuestros compromisos con con nuestra economía y con nosotros mismos.
Así que he creado algunas tablas con indicadores de gestión.
En primer lugar, comparando el avance del 2008 con lo que hicimos en el 2007.
Se que muchos ya superaron con creces sus rendimientos de todo el 2007, pero es bueno que lo vean graficado y que se gratifiquen por ello.
Pero también es bueno que miren cuanto más pueden hacer en lo que resta del 2008 y nos pongamos presión.
La solidez de una empresa no la dan sólo sus números acerca del rendimiento económico, así que hay varios temas más que estamos trabajando: recursos humanos, infraestructura, inversiones realizadas, margen de utilidad de la empresa, número de clientes, servicios prestados o productos vendidos, etc.
¿Por qué?
Porque un crecimiento en ventas siempre es visto como algo maravilloso, pero te puede desestructurar la compañía e incluso te puede desestructurar en términos personales.
El individuo, uno como eje de nuestra vidaEntonces, junto con ello, también estamos evaluando si nuestras metas personales están siendo cumplidas.
¿Cuáles eran mis metas íntimas al comenzar el año?
Personalmente creo que no las tenía explícitas. Razones varias de un comienzo de año turbulento. Pero ahora que me estoy viendo forzado a pensarlas, creo que la mano va por acá: sanidad en mi corazón, recuperación de mi cuerpo, mejora de la calidad de mi espacio, mejora en mi vínculo con las personas, mejora en mis ahorros personales, más foco en mi negocio.
Miro hacia atrás en este esfuerzo de leer lo actuado hasta hoy, 7 de setiembre del 2008, y, vamos; no ha estado tan mal. Falta, digamos que ha sido un año de tránsito, pero ha estado bastante bien.
El corazón está en bastante mejor forma que en el 2007. Tiene más libertad y definitivamente menos angustia. Debo prepararlo más y equilibrarlo un poco y en eso ando.
El cuerpo está mejor. Estoy recuperando mi espalda, algo de elasticidad y movimiento. El peso viene mejor, en el 2007 adelgace seis kilos y pretendo terminar el año con otros seis kilos menos. Ya llevo dos, faltan cuatro. La meta no me parece a estas alturas complicada. He cambiado bastante mi tipo de alimentación y eso hace que internamente deba también estar más sano. Año de tránsito alimenticio que espero consolidar con fuerza el 2009.
¡Quiero dejar de fumar! Bueno, bueno, ¿podré? El tema es que estoy contento pues llevo dos días en los que mi consumo de tabaco ha bajado drásticamente. Creo que apenas fumé un cigarro el viernes y dos ayer sábado. He hecho trampa, ayer no salí (lo bueno es que tampoco fumé en casa, lo malo es que perdí el concierto de la Sarita) y el viernes estuve todo el día en un seminario y luego con P y T que no fuman, entonces, no hay mucho mérito aun. Pero algo es algo. Además, apenas enuncié este asunto de las metas, el tema de dejar el cigarrillo ha copado parte de mi pensamiento. Quiero dejar de fumar. Espero poder hacerlo antes que culmine el año.
Hay cosas que hice que me han servido un montón. El Yoga, las sesiones de Ayahuasca, el continuar enseñando (y aprendiendo), el tomarme espacios libres de carga laboral..., y ahora, con el Sadhana, siento que voy a estar más fuerte. Cuarenta días de ejercicios, respiración y meditación matutina van a producir sus buenos resultados. Ando confiado en eso.
Podría continuar evaluando, pero quería compartir esto. Falta un poco menos de 120 días para terminar el año: ¿aceleramos un poquito en torno a nuestras metas personales? ¿Las hacemos explícitas y nos comprometemos?